Tumbleweed Desert: el diseño en la desertificación de los territorios

La desertificación es el proceso de degradación de los ecosistemas de zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas, dada por condiciones climáticas (aridificación) y actividades antrópicas. La desertificación fue considerada por la ONU en 1994, como el problema más grave que vive la humanidad y que afecta al medio ambiente y su desarrollo. Según datos de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de México, «alrededor del 70% de los 5.2 billones de hectáreas de tierras secas utilizadas para agricultura en el mundo ya están empobrecidas».

Pero, ¿Qué se puede hacer con el diseño en estas zonas deprimidas?. Las respuestas están en la definición clara de los destinatarios y la comprensión del entorno para localizar las oportunidades de diseño. El año pasado, en el proyecto Mine Kafon, se desarrolló una estructura movida por el viento capaz de localizar minas antipersonales en zonas desérticas, que han sido escenarios de conflictos bélicos.

Con otros propósitos no menos importantes, el diseñador industrial Israelí Shlomi Mir desarrolló una estructura, inspirada en esos ‘amasijos’ de plantas movidas por el viento llamados tumbleweeds, que podemos ver en zonas desérticas. El Tumbleweed Desert es un robot que utiliza la energía eólica para movilizarse, con la idea de estudiar la desertificación y ayudar a los especialistas a comprender mejor el fenómeno.

Modelos iniciales de la estructura.

Este aparato utiliza una vela circular de tela suspendida internamente en un marco de acero. Un estructura esférica sencilla capaz de  rodar a través del terreno y que porta un dispositivo para hacer reconocimiento y lectura de la topografía. Esto podría ayudar, por ejemplo, a la comprensión sobre la formación de las dunas de arena.

Pero también, en el caso de zonas desérticas, la plantación de semillas durante el recorrido de este sistema, podría minimizar los devastadores consecuencias de la desertificación.

Por los momentos, el Tumbleweed Desert es un prototipo. Su liviana estructura metálica en forma circular crea condiciones de tensión, que le permiten adaptarse a los terrenos. Al mismo tiempo, porta un generador sensible al movimiento que permite dar energía a los sensores, el computador y el motor que lleva en la parte central de la estructura.

Un buen ejemplo del diseño al servicio de problemas sensibles de la humanidad y en las orillas de la ciencia y la tecnología, en productos inspirados en la naturaleza. Una utilización pertinente de la biomimética, entendida como el rescate de sistemas naturales para su aplicación en sistemas artificiales en beneficio del hombre.

Información

Shlomi Mir 
www.shlomi-mir.com

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