Hoverbike: las ganas de volar o caprichos de la ingeniería
Los sistemas de transporte son definitivamente uno de los grandes temas del diseño. La idea del transporte nos lleva inmediatamente a la imagen de la ciudad, del territorio.
La Hoverbike es un proyecto desarrollado por el ingeniero australiano Chris Malloy, quien ha estado trabajando en este prototipo durante algunos años. Se trata de una motocicleta que en lugar de ruedas utiliza dos grandes ‘ventiladores’ en forma horizontal, alimentados por un motor de 1.170 cc.. En las especificaciones del proyecto, Malloy estima que la Hoverbike puede desplazarse a una velocidad de 170 kph y podría tener un buen desempeño en vuelos de altura.
Este proyecto, porque se trata simplemente de un proyecto, lo vimos reseñado en en el portal Core77 y coincidimos con algunos de las apreciaciones que allí se hacen. Especialmente con la sospecha sobre la veracidad y validación de esta propuesta, porque en la página de este ingeniero únicamente aparecen fotografías. Además, surgen algunas interrogantes fundamentales: ¿Cómo son los sistemas de control?¿Que tipos de interfaces de usuario se necesitaría para realizar maniobras en un dispositivo como este? ¿Es un aparato seguro?.
Algunos elementos de su funcionalidad están inspirados en los famosos Hovercraft, aerodeslizadores que realizan la sustentación lanzando chorros de aires contra la superficie debajo del cuerpo de la máquina. Estos Hovercraft han sufrido incrementos importantes desde la primera idea surgida en el siglo XVI. Hasta que solamente a mediados del siglo XX hubo un perfeccionamiento de sus mecanismos. Hoy en día se utilizan comercialmente en todo el mundo y para diferentes propósitos. En Inglaterra existe el Hovercraft Museum que recoge la historia de estos sistemas.
Otros conceptos han sido desarrollados con esta idea. El diseñador industrial chino Yuhan Zhang propone este vehículo para la Volkswagen: el Aqua Hovercraft.
El vuelo siempre será un atractor de las ideas del futuro. Por el momento, algunos intentos de la ingeniería y el diseño estarán formando parte de una extensa lista de ‘gadgets’ o en los sistemas de comunicaciones del futuro.
Muchos de estos proyectos, que habitan en las fronteras con el diseño industrial, padecen actualmente los embates del discurso de la sustentabilidad. Ya no tienen fundamentos válidos para la construcción del futuro. Vehículos como la Hoverbike serán cuestionados con mucha furia, por los costos de energía asociados al desarrollo de sistemas de transporte de uso individual, especialmente para la ciudad. Sin embargo, no deja de ser una máquina fantástica!.
En estos días, nuestro buen amigo Iván Cortés de la revista ProyectoDiseño de Colombia colocaba en el twitter: “connecting design to the city, industry and society“. Esta frase podría resumir los campos de trabajo del diseño industrial, donde se incluye la ciudad como el gran espacio de desarrollo y de discusión de la disciplina.